Restaurantes, fondas y puestos de comida en Puebla han recortado personal y aumentado el precio de sus menús debido al alza de precios de insumos básicos ocasionados por la inflación.

El dueño de La Fama de Franco, ubicado en boulevard circunvalación, abrió su restaurante de pizzas y comida italiana hace 11 años, pero los meses de pandemia han sido los peores para su negocio y no avizora una mejora.

En entrevista indicó que tuvo que despedir a tres personas de las ocho que trabajaban con él, y aun así no le es rentable su local, pues las ventas son bajas y la renta es alta.

A esto sumó el alza de precios de los insumos, pues el jitomate, la harina, la cebolla, y las carnes frías, así como quesos y mariscos, son primordiales para elaborar sus recetas y cada mes aumentaron durante 2021.

Lucía, quien tiene un puesto de memelas, tortillas y picaditas, ubicado en calle Ejido, comentó que ha tenido que absorber el costo extra de los insumos, pues teme que al subir sus precios las ventas caigan aún más de lo que cayeron el año pasado.

Comentó que tiene que comprar un tanque de gas cada 4 días, así que gasta 900 pesos a la semana solo en el combustible, y en insumos hasta dos veces más.

Comentó que solía comprar la manteca de cerdo en 25 pesos y ahora debe pagar más de 40, además de que a su esposo le bajaron el sueldo en su trabajo, lo cual complicó aún más la situación económica.

La taquería Fátima, a unos metros del Mercado Zapata, ante los efectos de la pandemia tuvo que incrementar sus precios, así que el kilo de carne árabe que vendía en 170 pesos pasó a 200 pesos el inicio de año, y fueron despedidas dos personas porque ya no era posible pagar sus sueldos.

Y a esto sumaron que tuvieron que retirar una mesa para evitar aglomeraciones y operar con aforo del 70 por ciento.