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En penales y 70 años después, Atlas es el campeón de México

  • Edwin García
El partido tuvo que definirse desde los once pasos; Julio Furch fue el encargado de sepultar a La Fiera al no perdonar en su disparo
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70 años después…

La ciudad de Guadalajara se encuentra de festejo con un grito que habían ahogado durante décadas. Hoy, dignamente, llegaron a su apoteosis debido a que el equipo de Atlas se coronó campeón de la Liga MX luego de dejar en el camino al cuadro de León. Los dirigidos por Diego Cocca no pudieron mostrarse superiores en el marcador orgánico y tuvieron que aguardar hasta los tiempos extras para, posteriormente, traer de regreso una fiesta que ya había sido olvidada por esta afición.

Los Zorros llegaron a este cotejo con una desventaja no tan escandalosa, aunque sí vulnerables debido a que las figuras de su rival también se podían hallar en la banca, lo que les convertía en agentes peligrosos desde cualquier ángulo. “La Fiera” se impuso en el compromiso de ida y dejó las cosas en un 3-2 favorable, algo que depositaba toda la responsabilidad en los Zorros por buscar la “hombrada” y al fin coronarse en el Estadio Jalisco.

El primer tiempo se definió por la seguidilla de aproximaciones locales al arco visitante, aunque ninguno con la efectividad suficiente para mandar el balón al fondo. Desde el minuto 5, Julián Quiñones se perdió una oportunidad gigantesca luego de recibir el balón en el área; el colombiano no pudo definir de buena forma y la mandó por un lado.

León también hizo lo propio y trató de llegar con balón a profundidad en intentos esporádicos que poco a poco hacían ver mal a la defensa rojiblanca. Pero justo en esta reacción esmeralda fue que llegó una de las jugadas que dejó con el grito reprimido en el Estadio Jalisco: nuevamente Quiñones llegó al área y elevó el esférico para evitar a Rodolfo Cota, sin embargo, el disparo pegó de forma dramática en el poste sin hacer daño ni acercarse en el marcador.

 

El buen presagio

La igualada rojinegra en el marcador global no llegó sino con un poco de dramatismo previo. Atlas fue más punzante y nuevamente Quiñones protagonizó una jugada en la que quedó con balón en portería, pero sin control para poder mandarla al fondo; y esto recién iniciaba.

Y por fin llegó. Fue hasta el minuto 55 y con un golpe de suerte. Aldo Rocha mandó un disparo derivado de un pase de Quiñones que Rodolfo Cota atajó a una mano y mandó al córner. El cobro llegó y la jugada fue seguida por un remate mordido donde el mismo Rocha fue el encargado de desviar la bola con la cabeza, lo que confundió al cancerbero esmeralda y decretó la igualada en el marcador global; el 3-3 ya era una realidad y el Estadio Jalisco estalló verdaderamente.

Pero el dramatismo no dejó de acompañarnos, pues cuando Atlas tuvo la oportunidad de liquidar el partido y poner la serie 4-3 en su favor, llegó una falla estólida.

Corría el minuto 80 y Brayan Trejo llegó al área con balón controlado. Tras una serie de regates sacó un derechazo que venció a Cota, pero que se estrelló en el poste izquierdo. La bola quedó viva y Edgar Zaldivar se la encontró sin marca, con la única responsabilidad de mandarla a guardar con un cabezazo en el que no tendría complicaciones, ya que Cota estaba vencido. Sobra decir que esto no fue posible, pues inexplicablemente la mandó a una zona donde no hizo daño y el arquero leonés pudo recogerla y sacarla de ahí.

El empate prevaleció hacia los minutos finales y el silbante decretó el final del tiempo regular, para dar paso a los dos tiempos extras: nada para nadie aun en esta fase, aunque los intentos de ambos conjuntos fueron evidentes y a la vez imprecisos.

Culminada la media hora extra, los penales fueron más cardiacos aún, pues cuando Atlas pensaba que tenía ventaja por el fallo de Fernando Navarro, el héroe anterior (Aldo Rocha) también erró en su disparo y dejó las cosas igualadas. Ahora todo dependía de los cobradores rojinegros con la única misión de no volver a errar.

El desempate llegó con un nuevo fallo del León en pies de Luis Montes, para dejar la mesa servida a Julio César Furch. El atacante no perdonó y metió el gol que le dio a los rojinegros su segundo título de liga en la primera división mexicana. Sí, el mismo Furch que se perdió todo el torneo anterior por una lesión desde la pretemporada fue el encargado de darle a los jaliscienses una alegría que parecía extinta.

Celebra el Atlas, el Grupo Orlegi y toda Guadalajara, salvo los vecinos del “Rebaño”,

 

Foto: Facebook

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