El patronato liderado por Horacio Magaña Martínez dejó en claro que no devolverá la Universidad de las Américas Puebla (UDLAP) a la familia Jenkins de Landa, a pesar de la suspensión de amparo ejecutada por el juez civil 24 de la Ciudad de México.

Al respecto el apoderado legal del patronato, Rodrigo Gurza Cárdenas, explicó en entrevista que no se puede entregar la universidad porque hay otros procedimientos legales en curso aún pendientes de resolverse.

Comentó que para el siguiente jueves se prevé una audiencia en la que se podría determinar cuál de los dos grupos se quedaría al frente de la institución educativa, y señaló que esta audiencia pendiente se ha diferido 14 veces por la familia Jenkins de Landa.

Aunque el juez de la Ciudad de México determinó que debe regresarse la casa de estudios, sostuvo que esta orden debe pasar por un juez de Puebla, quien debe de determinar si es viable o no.

Gurza Cárdenas declaró que tampoco podrían regresar la universidad al anterior patronato porque serían cómplices de un grupo que afectó a la casa de estudios.

En su momento jueces federales y estatales libraron órdenes de aprehensión en contra del primer patronato de la UDLAP y sus principales directivos por lavado de dinero, desvíos de recursos y fraude por un monto por arriba de 14 millones de pesos.

Precisó que en el caso de fraude se detectó que se desviaron recursos de la UDLAP para beneficio de terceros, utilizaron factureras y simularon operaciones.

Por ello insistió en que los intentos de la familia Jenkins de Landa por recuperar la universidad son ilegales, y la suspensión dada por José Carlos Ibáñez Méndez, secretario del Juzgado Tercero de Distrito en Materia de Amparo con sede en Cholula, es irregular, pues muestra de ello es la investigación en su contra iniciada por la Fiscalía General de la República (FGR).