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MLS derrota a la Liga MX y se queda con el Juego de Estrellas

  • Edwin García
El marcador desde los once pasos fue de 3-2 en favor de la liga norteamericana y con ello suman ya tres torneos consecutivos imponiéndose ante los combinados de México
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Un espectáculo que se quedó corto.

La primera edición del Juego de Estrellas entre la Liga MX y la MLS resultó como un partido común, algo que se explica porque los futbolistas (al menos los “mexicanos”) no están acostumbrados a ese tipo de encuentros. El resultado no fue lo más importante, pues la entrada en el estadio del LAFC fue bastante abundante pese a que la gente no pudo observar alguna filigrana o demasiados goles. Bien es cierto, la seriedad se impuso y los jugadores quisieron dejar en alto a sus respectivas ligas, aunque sin dar el mayor de los esfuerzos que como lo hacen en los torneos locales.

Mezclar a una buena cantidad de jugadores en un solo plato arrojó un partido poco entretenido. La tanda de penales tras el empate a un gol en tiempo regular fue algo de lo que pudo rescatar las emociones, pero los futbolistas incluso en eso se mostraron erráticos; de un total de cinco malos disparos, tres fueron del lado mexicano para que al final la MLS se quedara el triunfo.

En cuanto a lo táctico se puede decir poco. Los estrategas Juan Reynoso y Bob Bradley se dedicaron a hacer un auténtico “postre de todo” con los buenos elementos que tuvieron a disposición, el problema fue que muchos apenas hallaban su ritmo en el campo y repentinamente tuvieron que salir del juego para que se le pudiera dar minutos a todos.

Antes de la primera cascada de cambios hubo un momento incómodo y hasta predecible, pues los seguidores que asistieron al Banc of California Stadium emitieron el grito que la FIFA considera discriminatorio en los primeros despejes de Pedro Gallese. El árbitro Armando Villareal no dudó en aplicar el reglamento y tuvo que detener el juego por dos minutos.

El encuentro en sí ofreció pocos lujos. Diego Rossi eludió a Memo Ochoa con un tiro elevado y el balón se dirigía a la portería, pero Jorge Sánchez se lanzó para sacar la pelota con el pie y salvarla apenas en la línea, jugada que quizás fue la más emocionante de toda la noche.

Tras el susto, y luego del grito homofóbico, la Liga MX pudo hacerse presente en el marcador gracias a la genialidad de Jonathan Rodríguez, quien amoldó con el pecho un balón que le llegó de pase largo y rápidamente definió raso a un costado de Pedro Gallese. El “Cabecita” fue uno de los jugadores que iniciaron el duelo.

Cuando el juego recién se amoldaba, llegó la primera carretada de cambios. Reynoso sacó a Guillermo Ochoa, Ángel Mena y Nicolás Ibáñez para ingresar al campo a Alfredo Talavera, Orbelín Pineda y Santiago Giménez. En ese instante la poca seriedad del compromiso cayó. Bob Bradley fue más arriesgado y metió a cinco elementos de un jalón, combo en el que se incluyó a Rodolfo Pizarro; el mexicano tomó el lugar de Lucas Zelarayán.

El orden, como era de esperarse, se perdió y las jugadas fueron más individuales que colectivas. Lo que siguió fue un auténtico rompecabezas imposible de armar, pues los técnicos estaban obligados a meter a sus 27 jugadores.

Reynoso cambió a todos para el segundo lapso. La Liga MX regresó con otras armas y en el campo estuvieron William Tesillo, Luis Romo, Rubens Sanbueza, Rogelio Funes Mori, Salvador Reyes, Alexis Vega, entre otros. La calidad en la cancha ya era demasiada, pero nunca terminaron por entenderse o no quisieron hacerlo, por lo que el esfuerzo fue poco.

La MLS apretó poco, pero se encontró el tanto del empate a través de un cabezazo de Jesús Murillo, Pablo Aguilar lo marcó de manera tibia y permitió que el delantero anotara a placer. Luego de eso Bradley vació su banca, donde el cambio más esperado era el de Nani; el portugués fue una estrella internacional años atrás con el Manchester United, por lo que el hoy delantero del Orlando City fue el último en entrar al césped.

Reynoso también agotó sus cambios dándoles minutos a Erik Lira y Víctor Guzmán, pero en ese instante del juego la tensión creció. Las dos ligas quisieron el triunfo, los balones llovieron en las áreas, pero el gol simplemente no cayó.

El ganador del juego de estrellas se definió en penaltis. Por la Liga MX sólo pudieron anotar Rubens Sambueza y Luis Romo, mientras que los norteamericanos se despacharon con tres goles que les dieron la victoria en este partido histórico.

Foto: Twitter

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