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Diputada poblana pide recursos del PEF para salud mental de calidad

  • Norberto López
Claudia Báez señala que se necesita personal calificado
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La diputada federal del Grupo Parlamentario del Partido Encuentro Social (PES), Claudia Báez Ruiz, exhortó al titular del Poder Ejecutivo Federal para que a través de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), incluya en el Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación para el Ejercicio fiscal 2022, una partida presupuestal específica para brindar atención de salud mental de calidad a todos los mexicanos.

Asimismo, solicitó a la Secretaría de Salud fortalezca el vínculo del primer nivel de atención con los servicios especializados de salud mental, con la finalidad de que la atención psiquiátrica se encuentre al alcance de la población que lo requiera. 

La legisladora por Teziutlán, refirió que hay un déficit de profesionales ya que México tiene alrededor de 4 mil 600 psiquiatras en todo su territorio y se requieren de 12 mil a 20 mil para brindar una atención adecuada. 

Indicó que la mayor parte de los estados presenta déficits de psiquiatras superiores a 90 por ciento y que definitivamente no hay abordaje de la salud mental en el primer nivel de atención. 

“Actualmente sólo existen en territorio nacional cuatro mil, de los que mil 400 trabajan en el servicio público y la mayor parte de estos profesionales se encuentran en la Ciudad de México, mientras que en áreas rurales y conurbadas no se brinda el servicio”, señaló. 

En materia presupuestaria en el Presupuesto de Egresos de la Federación para el Ejercicio Fiscal de 2021, apuntó que se destinan 3 mil 124.9 millones de pesos a la atención de salud mental, presupuesto menor en 0.1% respecto a lo aprobado en 2020.  

En tanto que el promedio de asignación en términos porcentuales respecto del Presupuesto destinado al Ramo 12 “Salud” es de 2.2%, para 2021 se destina el 2.1%, porcentaje menor a lo que se venía destinado en los últimos 4 años. 

La OMS menciona que los países de ingresos medios y altos destinan 2.4% y 5.1%, respectivamente, de su presupuesto de salud para salud mental.  

Báez Ruiz, señaló que si se toma en cuenta el contexto del impacto sustancial en la salud mental a raíz del Covid-19, sumado a la carga de afectaciones mentales prexistentes en la población, la salud mental será motivo de preocupación para ejercicios fiscales subsecuentes, “ante ello la respuesta inmediata debe incluir apoyo presupuestal para la atención de salud mental, así como en la formación de profesionales en la materia, el requisito indispensable será aumentar la inversión en salud mental como tema prioritario”.  

De acuerdo con la OMS quienes inviertan en salud mental cosecharán beneficios. Estimaciones previas a la Covid-19 cifran en casi un billón de dólares las pérdidas anuales de productividad económica causadas únicamente por la depresión y la ansiedad. Sin embargo, algunos estudios revelan que cada dólar gastado en tratamientos de la depresión y la ansiedad basados en datos empíricos genera un retorno de 5 dólares, destacó.

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