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Tianguis de Atlixco se acopla al sano retorno y revive las ventas

  • Angelina Bueno
Comerciantes improvisan para cumplir medidas de prevención contra covid19
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En medio de los aromas, colores y gritos de las marchantas el tianguis regional de Atlixco revive improvisando mecanismos para poder cumplir con los acuerdos que se pactaron para que los más de 5 mil mercaderes regresaran a la vía pública en las calles de la colonia Álvaro Obregón a escasas 4 cuadras del Centro Histórico.

Este martes fue la segunda plaza después del castigo puesto por la autoridad local por no cumplir con las medidas de prevención contra Covid y esta vez es notable el cuidado que los tianguistas están poniendo, pues se puede observar la improvisación que hacen para aislarse del resto de sus compañeros y de los clientes.

Con plástico para forrar libretas encapsulan sus puestos dejando espacio suficiente para poder despachar y recibir el pago. Algunos, como es el caso de María que vende productos de mercería en la esquina de la 3 sur 9 poniente, usan hasta cucharones de madera al recibir el dinero.

Recorriendo las calles que conforman el mercado más importante de la región donde convergen vendedores y productores de todo el Valle, del Estado y hasta de otras entidades del país, es visible que el uso del cubrebocas tanto en tianguistas como en clientes ya es una constante. Algunos, los menos, siguen haciendo mal uso de él, pues la mayoría ya lo porta.  

También es posible encontrar en pleno pasillo, frente a un puesto de carnitas un lavamanos improvisado con una cubeta que tiene adaptada una llave, esto sobre un banco y en la parte superior una botella de jabón líquido y el letrero de invitación para que quien lo necesite pueda asearse las manos.

Las frutas y verduras ya las empaquetan, es decir ya tienen por kilos pesados los productos para evitar que estén en constante contaminación y que la gente las esté tocando, más aún si se trata de alimentos preparados o divididos para la venta individual como las sandias

Lo que sigue fallando es la sana distancia, imposible mantenerla en los pasillos que por tramos se vuelven muy delgados y en donde apenas caben dos personas, pero pasan tres incluyendo a una señora con canasta, a un diablero con carga y un vendedor ambulante con cucharón lleno de fruta.

La aglomeración de personas es inevitable, de compradores al menos se habla de una fluctuación de dos mil 500 a tres mil, que recorren cada área del mercado en busca de diversos productos pues en este tianguis igual se encuentra hilo y aguja que chiles secos o semillas para sembrar.

Doña Isabel quien vende calcetines, ropa interior en la esquina de la 11 poniente y 3 sur platicó que ha sido muy difícil la contingencia sanitaria para ellos desde el inicio, pues la suspensión del tianguis, el traslado a los mercados temporales, y ahora adaptarse a obedecer las medidas de prevención, complica la venta.

Ella en su puesto que abarca aproximadamente dos por dos metros ha colocado en cada esquina la base donde coloca su mercancía palos, en ellos coloca el plástico que normalmente se usa para forrar libretas y dejó un espacio para despachar y otro para entrar.

Sentada en el centro con su cubrebocas tricapa negro colocado sobre nariz y boca, dice que los clientes la han felicitado por estarse adaptando al sano retorno, porque es la manera de proteger a todos los que ahí ingresan.

“Fue difícil, no había ventas, bajo la gente, pero ya se está componiendo y nosotros pues mejor obedecemos, el sábado pasado nos avisaron que quien no cumpliera no se le dejaría vender y mire en eso estamos”, apuntó.

De esta forma el polémico tianguis de Atlixco revive ante el Covid19, convirtiéndose en la segunda actividad económica que podrá salvar a este municipio de la crisis que dejó la pandemia como daño colateral, de la mano con la producción del campo se convierten en el salvavidas de este pueblo mágico que se ha quedado sin turistas.

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