• Medio Ambiente

El volcán Popocatépetl tiene un semestre de baja actividad: UNAM

  • Redacción
Es fundamental continuar con la observación cercana de su actividad: Hugo Delgado, director del IGf
.

La actividad del volcán Popocatépetl en el primer semestre de este 2020 ha sido baja, según reportan científicos del Instituto de Geofísica (IGf) de la UNAM y del Centro Nacional de Prevención de Desastres (CENAPRED).

La actividad volcánica del coloso, según los expertos, se ha caracterizado por pequeñas emisiones de cenizas, bajas emisiones de gases y tremor de alta frecuencia y baja amplitud.

Robin Campion y Ángel Gómez Vázquez, investigadores del IGf, junto con Paulino Alonso Rivera, del CENAPRED, realizaron un sobrevuelo para comprobar que la composición de los gases emitidos indica que la actividad actual corresponde a la desgasificación residual de un magma emplazado el año pasado, y permite descartar una alimentación significativa en magma juvenil.

Hugo Delgado Granados, vulcanólogo y director del IGf, dijo que la actividad eruptiva de “Don Goyo” se encuentra dentro de los niveles de actividad conocidos, pero que es fundamental continuar con la observación cercana de su actividad en colaboración con las autoridades nacionales de Protección Civil.

Fueron alrededor de dos horas las que duró el sobrevuelo de los expertos, en las que se pudo ver parcialmente el fondo del cráter, esto por la abundancia de material condensado (aerosoles líquidos blancos y ceniza volcánica gris) en la pluma de gas.

La información compartida en el portal informativo de la UNAM señala que el diámetro del cráter interior se encontró sin cambio con respecto al vuelo anterior, realizado en febrero 2020.

Además, se pudo identificar en su fondo la presencia de bloques remanentes de un domo chiquito, emplazado probablemente a mediados de mayo.

Al realizar el sobrevuelo, el Popo tuvo explosión pequeña con expulsión de bloques en la terraza del cráter exterior y el viento débil llevó la ceniza generada por esta explosión al oeste.

El tamaño de los restos del domo indica que su diámetro fue inferior a 100 metros, lo que lo categoriza como pequeño. Es poco probable que un domo de ese tamaño genere explosiones fuertes, concluyeron los expertos.

Con información de la UNAM

Tags: 

Comentarios de Facebook: