A la Calculadora de Complicación Covid-19 lanzada el martes por el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en el sitio http://www.imss.gob.mx/covid-19/calculadora-complicaciones le faltan factores de riesgo, mecanismos para identificar el peso real y filtros sobre el nivel de enfermedades, de acuerdo con ejercicios realizados por e-consulta con seis ciudadanos.

En la herramienta, consideraron algunos, se necesita incluir factores de riesgo relacionados con el trabajo, así como de salud que incluyen el padecer asma y alergias o cursar un embarazo. Para otros la selección del nivel de peso es subjetiva. También hay quien considera que deberían agregarse los niveles estables o altos para medir la hipertensión o  diabetes.

En las opiniones también desataca que la herramienta debe promocionarse, que proporciona orientaciones útiles para cuidarse del coronavirus y que para contestarla hay que ser sinceros y conocer aspectos básicos de la propia salud.

Alfredo Ábrego, 28 años, asma y resultado positivo a covid-19, 28 por ciento de probabilidad.

El trabajador de servicios turísticos Alberto Ábrego es el más joven de los participantes con 28 años y tuvo 28 por ciento de riesgo medio de contraer Covid-19, según la calculadora del IMSS. En la práctica ya dio positivo a la enfermedad y considera que influyeron factores no considerados por la institución.

En su caso, expuso, estuvo en contacto con turistas extranjeros a inicios de abril cuando ya se habían registrado los primeros contagios en México y además padece asma. Más que la enfermedad, considera que la calculadora debería tomar en cuenta a las personas que por sus actividades y contacto con otras personas, tienen más riesgos.

"No es muy útil porque las preguntas que te hace son muy generales, yo siento que una pregunta que podría incluirse es sobre el dónde trabajas, por el contacto que tienes con otras personas y los mecanismos de protección que tienes disponibles", dijo.

Los síntomas de Ábrego se registraron entre el 13 y el 25 de abril. El Covid-19 fue confirmado por la prueba de laboratorio que le aplicaron en una institución de salud pública. En su experiencia los síntomas fueron similares a los del asma, aunque en periodos más largos.

Con la enfermedad que padece, las crisis para poder respirar duran hasta dos horas, mientras que con el coronavirus fue un síntoma que se prolongó por días. Aunque ya no tiene la enfermedad todavía siente dolores en la zona de los pulmones.

Julieta Cerezo, 31 años, embarazo y alergias, 17.1 por ciento de probabilidad.

Con más de tres meses de embarazo y antecedentes de alergias, la jefa de información de un portal electrónico Julieta Cerezo, considera que la herramienta del IMSS está incompleta. Ninguno de los dos factores aparece en la calculadora y con los datos que sí puede contestar, la herramienta considera que sólo tiene un 17.1 por ciento de riesgo medio.

La información que se ha difundido a nivel federal sobre el Covid-19, señala, dice en cambio que ella estaría en un doble riesgo. Estima que si los factores fueran considerados por el instituto, el porcentaje y las recomendaciones a seguir serían distintas.

"Sí deberían considerarlo, tal vez no como un padecimiento, pero sí como un grupo poblacional, si tienes tal edad, además en los padecimientos tampoco están consideradas las alergias, yo soy alérgica y estoy embarazada y me considero en doble riesgo", comentó. 

Otra deficiencia que Cerezo le ve a la herramienta, es que únicamente permite elegir entre el peso bajo, normal, sobrepeso u obesidad. Sin embargo esta es una elección subjetiva que realiza el usuario cuando existen otras herramientas que el IMSS pudo incluir para calcular el índice de masa muscular, mediante una ecuación que considera el peso, altura y edad.

Dado que se enteró de su embarazo a mediados de febrero y que su trabajo lo permite, ha cumplido con el aislamiento domiciliario y ello le ha ayudado a tener mejor control de sus hábitos alimenticios y su peso.

María Godoy, 44 años, hipertensión y obesidad, 42.1 por ciento de probabilidad

A sus 44 años la trabajadora en un área contable, María Godoy, considera que el conocer del 42.1 por ciento de probabilidad media que le da la calculadora del IMSS le da cierta tranquilidad y directrices para continuar con el aislamiento domiciliario que su empleo le permite cumplir.

Sin embargo cree que a la herramienta le falta difusión para que la población en general conozca cuáles son los factores de riesgo y cómo la combinación de los mismos puede generar que el porcentaje de riesgo sea más alto.

"Si me dices a mi, '¿Lo que te dice la calculadora te parece nuevo?', pues no, pero precisamente los sectores de la población que no tienen ese conocimiento, de las medidas, las cuidados, etcétera, son los que  más se deberían enterar de esto", dijo.

Tras emplear la calculadora y conocer tanto los resultados como las recomendaciones que le da el IMSS, Godoy opina que la alternativa debería promocionarse en radio y televisión para que la ciudadanía se motive a utilizarla y tomar conciencia de sus riesgos.

Francisco Sánchez, 56 años, hipertensión, 70.3 por ciento de probabilidad 

Para el reportero Francisco Sánchez de 56 años, la deficiencia de la calculadora del IMSS radica en la subjetividad de las preguntas. En su caso padece hipertensión y sumado a la edad, la herramienta le da una probabilidad alta de un 70.3 por ciento de riesgo alto.

Sin embargo, desde su propia experiencia la hipertensión puede ir de cifras que representan control, hasta cifras que suponen un mayor peligro con todo y que se consuman los medicamentos prescritos por los médicos. Los extremos, dice,  no se toman en cuenta por el instituto.

Al igual que Cerezo, considera además que es insuficiente darle al usuario cuatro tipos de peso, sin que se ejecuten mayores cálculos con los datos específicos de peso, estatura y edad.

"Lo siento un tanto subjetivo porque hay quien tiene hipertensión con 130 o 140 y hay quienes son hipertensos con 180 o 200 aun con que tomen los medicamentos, lo siento subjetivo porque también no están viendo el peso", comentó.

Aunque tiene una alta probabilidad de contraer Covid-19 según el IMSS, las actividades en campo que caracterizan a su trabajo no le han permitido cumplir con el resguardo domiciliario sugerido por las autoridades desde finales de marzo.

Julio Ruiz, 61 años, diabetes y consumo de tabaco, 88.8 por ciento de probabilidad

De los ciudadanos participantes, Julio Ruiz de 61 años es el que tiene un riesgo muy alto de 88.8 por ciento en la calculadora del IMSS. Juegan en contra la edad, que padece diabetes tipo 2 y que fuma. Ponerle un número a la situación, reconoce, le da otra perspectiva.

"No es nada más saber que son de alto riesgo los hipertensos, obesos, diabéticos, con enfermedades cardiovasculares, EPOC, tabaquismo, todo eso. Es tener un resultado y yo no sabía un estándar de riesgo", dijo.

De los señalamientos de la calculadora, reconoce, le resultan útiles las indicaciones de alimentarse mejor, dejar de fumar y cumplir con el suministro de medicamentos. 

Dado que ya es jubilado esa condición laboral le permite quedarse en casa y limitar que lo visiten en su domicilio. Sin embargo reconoce que sería más complicado si aun con esas condiciones tuviera que salir en busca de ingresos.

Al igual que las observaciones de Sánchez en torno a la hipertensión, advierte que la herramienta del instituto podría ser más exacta si se consideraran los niveles de glucosa de los diabéticos que realizan el ejercicio de medir sus riesgos.

Ruth Sáenz, 68 años, hipertensión, 75.1 por ciento de probabilidad.

Con 68 años, la ama de casa Ruth Sáenz es la participante mayor edad en el ejercicio. El único factor de riesgo que se suma es la hipertensión, pero el ser mujer y tener un peso controlado, la dejan dentro del rango de riesgo alto de la calculadora del IMSS en la que obtuvo un 75.1 por ciento.

En su caso señala que el resultado no le pareció tan novedoso porque se informa diario con las ruedas de prensa del gobierno federal. Las recomendaciones que da el instituto, sin embargo, no le sobran y considera que pueden servir para que la gente tome mejores decisiones.

Con el aislamiento, agrega, no es tan fácil tener un seguimiento a su salud como lo sugiere el IMSS, por las dificultades técnicas e inexactitud de los baumanómetos comerciales. Por ahora, le queda esperar a que acabe la cuarentena para volver a visitar a su doctor.

A diferencia de otros usuarios que sugieren mejoras a la herramienta del instituto, Sáenz considera que para que la alternativa sea efectiva, la ciudadanía debe contestar con sinceridad y conocer datos relevantes para la propia salud, como su tipo de peso.

"Más que nada que sea verídico lo que la persona dice para que el resultado sea cierto, si por ejemplo uno no está seguro de su peso, como yo que creo que ya bajé tres kilos pero no tengo cómo pesarme, puedo dar información que esté mal", comentó.