Dos de los puntos que se negociaron fueron el cambio de normas en la fabricación de vehículos y mejores salarios para trabajadores de la industria automotriz mexicana.

Durante la firma del T-MEC, Donald Trump subrayó la amistad que tiene con Andrés Manuel López Obrador.

Reconoció que Jesús Seade, subsecretario para América del Norte, y Marcelo Ebrard, secretario de Relaciones Exteriores, realizaron un buen trabajo.

Mike Pence, vicepresidente de Estados Unidos, afirmó que el antiguo Tratado de Libre Comercio se termina hoy y que comienza una nueva era de trabajo y crecimiento.

“El TLCAN termina hoy, y una nueva era de trabajo y crecimiento empieza bajo el T-MEC”.

Donald Trump presentará el T-MEC como uno de sus logros y se espera que lo utilizará en su campaña para un segundo periodo a la presidencia de Estados Unidos.

El lunes 2 de diciembre, el Consejo Coordinador Empresarial aseguró que eran inaceptables las demandas en materia laboral que proponía el gobierno de Estados Unidos, dentro del T-MEC.

Aseguró que las propuestas de Estados Unidos pondrían en riesgo la competitividad de México y la de sus socios en América del Norte.

“Observamos con gran preocupación que existen algunas demandas, en materia laboral, que resultan extremas y son totalmente inaceptables. Estas podrían afectar severamente la competitividad de México y de sus socios en América del Norte”.

El Consejo Coordinador Empresarial indicó que parecía que en Estados Unidos hay actores políticos que no querían que se aprobara el T-MEC.

“Tenemos la percepción de que algunos actores estadounidenses están tratando de presionar para que no haya un acuerdo”.

Los empresarios indicaron que le daban la bienvenida a las propuestas de enmiendas que benefician al T-MEC, pero que rechazaban las que afectan las cadenas de suministro que México ha creado desde hace 25 años.