A pesar de la relevancia de las redes sociales en las campañas políticas, los aspirantes a gobernar Puebla les sacaron poco provecho, de acuerdo con el estudio Observación Mediática Elecciones Gubernatura de Puebla 2019 presentado este miércoles por universidades e instituciones participantes.

Según las conclusiones, en la campaña los seguidores de Luis Miguel Barbosa Huerta, Enrique Cárdenas Sánchez y Alberto Jiménez Merino en Facebook, Twitter, Instagram y Youtube sólo crecieron un promedio de 11.5 por ciento en seguidores respecto a lo que ya tenían hacia el 29 de marzo.

En sus mensajes sobresalieron además los sentimientos negativos, se limitaron casi a la difusión, hubo poca interacción con la sociedad, quienes les siguieron fueron usuarios del círculo político y tampoco se observó el uso de bots para influenciar.

Las conclusiones también reconocen que la red social de Facebook fue la de mayor impacto y que, de los tres candidatos, Barbosa Huerta fue el que más volumen, contenido, popularidad y seguidores mostró.

En cuanto a las cifras de seguidores con los que cada candidato inició se observa también que el candidato de Juntos Haremos Historia traía ya una ventaja, por lo que capitalizó en el proceso electoral de 2018.

Empezó con una ventaja de 24 seguidores por cada seguidor de Cárdenas Sánchez y 12 seguidores por cada seguidor de Jiménez Merino y aunque hubo crecimientos en dos meses, fueron proporcionales a lo que ya tenían los candidatos.

Aunque el estudio se centró en la actividad de los candidatos en las redes sociales, también incluyó una encuesta de 690 jóvenes usuarios de Facebook en la que se detectó que el 73.9 por ciento de encuestados no se identificó con ningún partido, 10 lo hizo con el Partido Movimiento Regeneración Nacional (Morena) y el resto se distribuyó entre otras fuerzas.

Asimismo se midió qué tan identificados estaban los candidatos con las inquietudes de la juventud, un 81.7 refirió la seguridad; 49.1 la educación; 47.8 la corrupción; y un 46.5 la salud y el resto de la lista tuvo porcentajes menores.

Por otro lado se consideró un apartado de Solo para Incorruptibles en que se evaluaron propuestas y su viabilidad en materia de combate a la corrupción, así como temas de interés sobre los candidatos.

En ella destacó que Barbosa Huerta no actualizó lo que había declarado sobre su patrimonio y finanzas en 2018 y que en el caso de Jiménez Merino esa información mantuvo como pendiente de validación y publicación hasta el primer debate.

En el estudio participaron estudiantes de la Universidad de las Américas Puebla (UDLAP), la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP) y el Instituto Tecnológico Superior de Monterrey (ITESM) Campus Puebla.

Asimismo participaron el Observatorio de la Corrupción e Impunidad del Instituto de Investigaciones Jurídicas (IIJ) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), el Centro de Análisis para la Investigación en Innovación A.C. y la Asociación Mexicana de Ciencias Políticas (Amecip). 

Foto: Agencia Enfoque