Luego de que versiones periodísticas apuntaran a una reapertura del caso por tortura en contra de la periodista Lydia Cacho y una supuesta orden de aprehensión contra el exgobernador Mario Marín Torres, el equipo cercano al priísta confirmó que hasta el momento no han sido notificados.

Una fuente muy cercana al exgobernador informó a este medio que en días recientes, y hasta la fecha, ninguna autoridad federal le notificó al exmandatario sobre la reapertura del caso en el que se vio involucrado desde diciembre del 2005.

Por su parte, la periodista Lydia Cacho tampoco ha confirmado esta supuesta reapertura del caso ya que en su cuenta de Twitter agradeció el apoyo que ha recibido en los últimos 14 años para darle seguimiento a la violencia de la que fue objeto.

Sin embargo en un segundo tuit informó que hacía referencia a la improcedencia de un amparo tramitado por uno de los policías detenidos como autor material de la privación ilegal de su libertad y tortura de la que fue objeto.

Según la información de la nueva orden de aprehensión y la reapertura del caso publicada por el periodista Mario Alberto Mejía, también alcanzaría a otros personajes como el empresario Kamel Nacif y el ex director de la Policía Judicial, Adolfo Karam Beltrán.

Fue el pasado 10 de enero cuando el gobierno federal, a través del subsecretario de Derechos Humanos de la Secretaría de Gobernación, Alejandro Encinas, ofreció disculpas pública a la periodista como parte de un análisis hecho por la Comisión de Derechos Humanos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), que calificó que su detención fue arbitraria y punitiva.

"Le ofrezco una disculpa pública por violación a sus derechos humanos en el marco del ejercicio de su derecho a la libertad de expresión. Espero que este acto nos permita alcanzar una mejor cultura democrática para el fortalecimiento de los derechos humanos en México", dijo en su momento Encinas.