Miguel Reyes Hernández, investigador de la Universidad Iberoamericana, evidenció una serie de irregularidades durante el proceso para elegir gobernador de Puebla, al señalar que en tres de cada cuatro casillas los votos que reflejan las actas de escrutinio no coinciden con el cómputo oficial.

Durante la presentación en la Ciudad de México de su investigación denominada "Inconsistencias graves en la elección de gobernador en Puebla" , el académico explicó que en el 12% de las casillas hubo más de 20 votos de diferencia, y en el 61 por ciento fue de 1 a 19 sufragios.

Expuso que hubo marcadas diferencias entre los votos hechos para gobernador y presidente de la República, lo cual refleja que hubo votos “robados e ingresados ilegalmente” en las urnas revisadas, donde el rango de diferencia era superior a 20 votos. 

Esta modalidad fue denominada “Elefante o a Gran Escala”, y donde los supuestos beneficiarios se sirvieron con la “cuchara grande”. 

“Encontramos bastantes discrepancias, la primera tiene que ver con un diferencial de votos entre la votación de presidente y gobernador, donde hubo 104 mil votos más para presidente y en otras 40 mil más para gobernador, lo que quiere decir que en unas casillas se metieron y en otras se sacaron votos”, señaló.

En su investigación, el economista de la Ibero detectó que en 36 casillas los votos excedieron la Lista Nominal, 41 casillas se publicaron con cero votos, en 119 no se publicaron actas, en 13 todos los campos se encontraron vacíos y en 13 más los campos eran ilegibles.

Concluyó que no hay certeza respecto a quién ganó la elección en Puebla, a pesar de que el Instituto Electoral del Estado (IEE) determinó entregar la constancia de mayoría a Martha Erika Alonso de la coalición Por Puebla al Frente. Además responsabilizó al IEE de estas irregularidades.

Manipulación de casillas

En la presentación, el académico descubrió que en 3 de cada 4 casillas instalas en Puebla se manipularon los resultados, al señalar que de 7 mil 476 casillas, en el 73.9 por ciento (5 mil 524) se ingresaron o sustrajeron votos de manera ilegal.

Detalló que de una muestra del 12.1% de casillas (898) con más de 20 votos de diferencia, en el 66% hubo mayoría de votos para presidente de la República que para gobernador, lo que refiere que de estas se sustrajeron votos, mientras que en 33% se “embarazaron” las urnas con boletas para gobernador.

Además puntualizó que de la muestra, en 9 de cada 10 casillas los resultados de las actas no coinciden con el cómputo final. Señaló que la mayoría de inconsistencias se detectaron en casillas de Puebla, San Pedro y San Andrés Cholula, Tepeaca, Amozoc, Cuautlancingo y Ajalpan.

“En estos municipios de la zona metropolitana se concentran cuatro de cada 10 situaciones de manipulación electoral, casi todas dentro de la ciudad de Puebla, donde el IEE no sólo no verificó resultados, sino que los manipuló”, acusó.

Votación excede listado nominal

En el caso de las casillas en las que se inyectaron votos, Reyes Hernández citó el ejemplo de la casilla contigua 4 sección 1925 en el distrito 15 perteneciente a Tecamachalco, donde se contabilizaron mil 368 votos, lo que excedió la Lista Nominal de 717 electores registrados.

“En algunas casillas te encuentras que votaron para presidente de la República 401 personas y para gobernador mil 368, lo que es inusual en términos legales, ninguna casilla puede tener más de 750 votos por cuestiones de listado nominal”, dijo, tras señalar que en las actas sí se considera una menor votación.

Incluso, en la investigación detectó casos donde la votación para gobernador duplicó las personas incluidas en Lista Nominal, como ocurrió en una casilla de Cuautlancingo, donde hubo mil 308 votos para gobernador pero en el listado nominal había 649 electores. 

“Los ciudadanos realizaron un trabajo responsable y aseado, pero la autoridad electoral estatal malversó la información entregada por la ciudadanía cometiendo varios delitos electorales, al publicar cómputos del conteo distrital falsos, inexistentes y con información inexacta”, recalcó.

Además de estas anomalías, hay un 20% de actas que no fue publicado. 

En este sentido, Miguel Reyes estimó que considerando la totalidad de inconsistencias registradas sólo en el 12% de casillas que se tomaron como muestra y el 20% de información faltante, la diferencia de votos entre el candidato de “Juntos Haremos Historia”, Miguel Barbosa y Martha Erika Alonso se reduciría a la mitad.

“Solamente considerando que la tendencia en ese 12% de casillas permaneciera, más la información faltante en el 20% de las actas, la diferencia ‘oficial’ entre un candidato y otro de 124 mil 747 votos, se reduciría a la mitad”, estimó, por lo que quedaría en 63 mil 065 sufragios. 

Por lo anterior, se pronunció por una revisión “exhaustiva” y “a fondo” del 100% de los resultados de las casillas, al insistir que el cómputo final no da certeza del triunfo que el Instituto Electoral del Estado decidió otorgar a Martha Erika Alonso en las elecciones del 1 de julio.