La selección de Rusia aplastó por 5-0 a la de Arabia Saudita en el partido inaugural de la Copa del Mundo de Fútbol.

En un ambiente de fiesta y con un partido de algunos destellos de calidad, la selección rusa apenas tuvo problemas para hallar el dominio del partido que cerró con autoridad con los goles 4 y 5 en  las postrimerías del encuentro.

A los 11:38 minutos llegó el primer gol del Mundial y a partir de allí, todo fue coser y cantar para los anfitriones del torneo ante el escaso fútbol que mostró el rival.

Denis Cheryshev se destapó con dos extraordinarios goles (segundo y cuarto) para dar sabor a este partido marcadamente desigual.

En el final del encuentro, los goles 4 y 5 fueron no sólo la rúbrica perfecta para el cuadro ruso sino las mejores expresiones de calidad de todo el partido inaugural.