Las autoridades de Baja California Sur decidieron cerrar el Cereso de Loreto en el que sólo había 24 presos y mantenerlo costaba un millón 825 pesos al año.

El penal de Loreto comenzó a funcionar en 1998 y ya resultaba demasiado caro mantenerlo abierto, porque no había suficientes presos.

Los 24 detenidos que purgaban sus condenas en el penal de Loreto eran de dos estados vecinos y municipios de los alrededores.

Los presos fueron enviados a los penales de Santa Rosalía, municipio de Mulegé, Comondú y La Paz.

El secretario general de Gobierno, Álvaro de la Peña Angulo, afirmó que no se justificaba que el penal estuviera abierto.

“La mayoría de los internos eran de otros municipios y de otras entidades. No se justificaba que se mantuviera el penal ya, cuando el recurso está escaso”.

“Si estaban siendo procesados, a algunos se les trasladó al más cercano y si ya estaban sentenciados al lugar de residencia más cercano a la familia”, dijo.

Actualmente en el penal de Santa Rosalía tienen 160 detenidos; en Ciudad Constitución hay 150, y en San José del Cabo, hay 460 reclusos.

Crédito de la foto El Financiero