Durante la ceremonia de graduación de licenciatura de la Universidad Iberoamericana (Uia) Puebla, su rector Fernando Fernández Font pidió a sus egresados mirar por los otros, ser activos en la sociedad e incorruptibles.

Sobre esta última petición, el jesuita fue enfático al resaltar que las tentaciones estarán presentes como lo han demostrado experiencias con otros egresados y que será más fácil actuar en contra, que hacerlo a favor de las personas que tienen necesidades.

"Por ningún motivo se dejen corromper, por más que el manjar que se les ofrezca sea muy apetitoso. Con tristeza tengo que reconocer que no todos los egresados de nuestras instituciones han sido dignos de reconocimiento", dijo Fernández Font.

"Ser corrupto es muy fácil. Dejarse llevar por las corrientes dominantes de nuestra historia que sólo buscan el bien individual no implica demasiado esfuerzo; pero ir contra la corriente, no caer en las seducciones del placer, del dinero, del prestigio o del poder, eso sí implica una actitud de hierro, una voluntad inquebrantable, un amor capaz de llegar a lo más hondo de los fracasos de nuestro mundo para ofrecer un alivio a todos aquellos que lo necesitan", agregó.

La filosofía de San Ignacio de Loyola que se sigue en la Uia Puebla, recordó Fernández Font, está enfocada en formar hombres y mujeres que vean por y para los demás, en especial, resaltó, por quienes menos oportunidades tienen.

De los egresados, comentó, se espera que aprovechen para estos fines los talentos cultivados en la universidad, sentir dolor por quienes sienten dolor y ser críticos para identificar cómo los privilegios y actitudes propias han afectado a otros.

Asimismo, dijo, como rector les pide aprender a ser mejores ciudadanos con los retos que la sociedad impone para ello y también el elegir vivir y morir por algo que valga la pena.

Critica falta de acceso a educación

El mensaje de Fernández Font a los egresados de licenciatura también fue crítico sobre la falta de acceso a la educación que se tiene en México, aunque esta se considere en el discurso como un derecho.

Los 410 egresados de una generación de 590 alumnos a la que se le reconoció este día en la ceremonia, comentó, fueron afortunados por tener los apoyos y las condiciones necesarias para estudiar, sin embargo un alto porcentaje de población en edad de hacerlo no tienen acceso.

En el mundo, dijo, hay países que ofertan la oportunidad a quien quiera estudiar, de hacerlo gratuitamente, pero en el caso de México esto no se cumple y eso amplía la grieta entre quienes tienen y no obstáculos.

"Ahí sí los derechos son realidades que los estados se encargan de que lleguen a toda la población, pero en México se habla de que el derecho a la educación de calidad para todos, pero al mismo tiempo esto no sucede, ni es para todos ni es de calidad", dijo.

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