• Medio Ambiente

Aguas de caño fluyen en el nuevo parque de La Constancia

  • Patricia Méndez
Obras para desviar esas aguas fueron autorizadas por la Semarnat y tendrán un costo de 64 millones 620 mil pesos. En la ex fábrica textil se han invertido alrededor de 700 mdp
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El gobierno del estado reconoció que descargas de aguas residuales son arrojadas de manera irregular en los cauces que atraviesan la ex fábrica La Constancia, inmueble que pretende convertir en un “centro cultural” de carácter nacional.

La Secretaría de Medioambiente y Recursos Naturales (Semarnat) autorizó a la administración estatal realizar obras de desvío de aguas residuales en el inmueble, mismas que tendrán un costo de 64 millones 620 mil pesos.

En el transcurso del sexenio, se han destinado cerca de 700 millones de pesos en obras de rehabilitación en la ex fábrica textil, entre museos, casas de música y otras obras de mejoramiento.

Esta semana, la administración estatal abrió un nuevo concurso de licitación para construir un “museo del automóvil” que incluso contará con elevadores.

Río Atoyac, utilizado como vertedero de aguas industriales

En la Manifestación de Impacto Ambiental (MIA) que el gobierno del estado presentó a la Semarnat para emprender la construcción de obras de desvío de aguas residuales y pluviales en la ex fábrica La Constancia, reconoce que “el tramo en el cual se realizarán las obras, comprende un espacio por donde se conducen gran cantidad de descargas residuales, arrojadas de forma irregular por una gran cantidad de viviendas ubicadas en sus márgenes”.

En el proyecto se indica que históricamente el cauce del Río Atoyac, que atraviesa la ex factoría, ha sido usado donde se descargan aguas residuales y pluviales de la ciudad de Puebla. “Basta recordar que en su margen oriente se asentaron una gran cantidad de fábricas textiles que además de hacer uso de la energía del río, lo utilizaron como vertedero de sus aguas industriales”.

Diversos análisis reconocidos por la Comisión Nacional del Agua (Conagua) indican que los niveles de contaminación del cauce son alarmantes, pues estos provocan enfermedades graves en quienes están en contacto con el mismo como leucemia.

Aunque la administración del gobernador Rafael Moreno Valle prometió al inicio del sexenio emprender el saneamiento del rio, esto no se cumplió y la contaminación del mismo va en aumento.

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