Las únicas oficinas de la Sociedad Financiera Popular Ficrea en Puebla, ubicadas sobre la avenida Juárez, cerraron desde el viernes pasado y no hay un plazo para que vuelvan a abrir o los ahorradores recuperen su dinero.

El pasado 7 de noviembre la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) intervino gerencialmente la empresa de servicios financieros de ahorro y préstamos, debido a que se sospecha que incurrió en lavado de dinero.

Operaciones suspendidas en la Angelópolis

Las oficinas de Ficrea en la avenida Juárez número 1906 están cerradas desde el viernes pasado, según confirmaron los trabajadores de los locales vecinos.

Afuera, un guardia de seguridad privado era el único que estaba para informar a los ahorradores que las labores estaban suspendidas y que “en una semana regresarán a trabajar”.

Sin embargo, al llamar telefónicamente a las oficinas centrales en la ciudad de México los asesores confirmaron la intervención de la CNBV y aseguraron que no había una fecha definida para que los ahorradores tuvieran acceso a su dinero.

Además garantizaron que no habrá pérdidas, ya que mientras se haga la auditoría el dinero se reinvertirá hasta que la Comisión Nacional Bancaria y de Valores apruebe la salida de fondos.

Sin embargo no precisaron el número de ahorradores que existen en Puebla ni el monto de sus recursos invertidos.

Acciones poco transparentes

De acuerdo con un comunicado de prensa de la CNBV, Ficrea utilizaba a la sociedad anónima Leadman Trade –no regulada por el sistema financiero mexicano- para transferir recursos a sus clientes y además el pago de las amortizaciones de los respectivos créditos provenía a su vez de Leadman.

Esto representa una triangulación de recursos que no está transparentada, además de que ambas entidades financieras tienen un mismo socio accionista, que no fue identificado.

El 98 por ciento de la cartera de créditos de Ficrea se canalizaba a través de Leadman, lo cual no permitió a la CNBV conocer si estos créditos serían recuperados y la condición de la cartera de créditos.

La CNBV dio a conocer esta situación a la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), así como a la Procuraduría General de la República (PGR), para que investiguen el caso. Las indagatorias durarán como máximo seis meses.

Ficrea tiene una cartera de créditos por 5 mil 766 millones de pesos, provenientes en su mayoría de 6 mil 366 clientes ahorradores en Aguascalientes, Coahuila, Distrito Federal, estado de México, Guanajuato, Jalisco, Michoacán, Nuevo León, Puebla y San Luis Potosí.

De acuerdo con el organismo, Ficrea es la segunda empresa de su tipo con mayor capital manejado, aunque su cartera de clientes era muy reducida.