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Aspiración reeleccionista de Plascencia en la CNDH atraviesa el caso Chalchihuapan

  • Álvaro Ramírez Velasco
En 2009 su llegada recibió críticas; termina su periodo el 15 de noviembre. Senado definirá futuro de la institución
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La búsqueda de la reelección para un nuevo periodo de cinco años al frente de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) del ombudsman, Raúl Plascencia Villanueva, se entrecruza con la determinación que tendrá que realizar la institución sobre el caso de las “violaciones graves” a las garantías individuales de la policía del gobierno del estado de Puebla, contra habitantes de la comunidad de San Bernardino Chalchihuapan.

El periodo del titular de la CNDH termina el próximo 15 de noviembre y el Senado de la República determinará si lo vuelve a elegir para otros cinco años o selecciona, entre las propuestas que presenten los grupos parlamentarios de la misma Cámara alta, a un nuevo ombudsman para el periodo 2014-2019.

Este jueves, la CNDH emitió el comunicado CGCP/212/14, en el que informó que ejerció su facultad constitucional de Investigación de Violaciones Graves a los Derechos Humanos en el caso del desalojo del pasado 9 de julio contra habitantes de esa comunidad del municipio de Santa Clara Ocoyucan, Puebla, por policías estatales, en el que resultó asesinado un niño de 13 años y clasificó el caso como de “especial gravedad”.

También, a tres meses y medio de que concluya el periodo de Raúl Plascencia al frente de la institución y se dé su relevo o reelección, adelantó que “en el momento oportuno, la Comisión Nacional emitirá la determinación que corresponda conforme a sus atribuciones constitucionales”.

La Constitución permite la reelección del ombudsman en una sola ocasión y su selección se determina con base en propuestas que presenta la Cámara alta. Su elección la realiza el propio Senado –o en sus recesos la Comisión Permanente–, con la mayoría calificada, es decir, las dos terceras partes de los legisladores y su periodo es de cinco años.

Sobre esta posibilidad, Raúl Plascencia solamente ha dicho que estará “pendiente hasta que salga la convocatoria”.

Las críticas

Sobre la posible reelección de Plascencia Villanueva, la politóloga y articulista Denise Dresser escribió: “No. No. No. No a la reelección de Raúl Plascencia como presidente de la Comisión Nacional de Derechos Humanos. No a la permanencia de alguien que no puede con el puesto. Que no lo ha utilizado para defender los derechos humanos, sino para permitir que se sigan violando.

“Que no lo ha usado para empujar, sino para frenar. Que ha sonreído ante los cuestionamientos que se le hacen, en lugar de responderlos rápida y puntualmente. Alguien incapaz de comprender la labor que le corresponde. Investigar. Denunciar. Emitir recomendaciones. Insistir hasta que se cumplan. Ejercer otras atribuciones que fortalezcan su papel. No solamente llevar a cabo una función ceremonial que deja desamparadas a las víctimas, solos a los denunciantes, a la intemperie a quienes buscan protección y no la encuentran”.

Sobre su desempeño en la CNDH, durante el gobierno de Felipe de Jesús Calderón Hinojosa, escribió Alejandra Cullen ensinembargo.mx:

“Era el encubridor humanitario de Genaro García Luna, el aliado incondicional del gobierno en sus luchas políticas y en su guerra social. No sorprende entonces que el gobierno federal mintiera impunemente. Sabía que no sería auditado o delatado por el único órgano encargado de hacerlo. En fechas recientes, y habremos de ver mucho más, ha salido a la luz pública la manera como la administración Calderón fabricaba culpables e inventaba noticias. Hasta ahora se sabe de la invención de la muerte del Chayo, la fabricación de culpables para validar el Michoacanazo, la operación limpieza de la PGR, y la explosión del coche bomba en Juárez, además del vergonzoso caso Cassez y los abusos en el uso de los testigos protegidos. Hoy sus acusados están libres por falta de pruebas. Las mentiras eran obvias, pero la CNDH nunca las vio”.

La accidentada llegada

Plascencia Villanueva fue electo el 5 de noviembre de 2009 por el Senado de la República, en una segunda vuelta –ya que en la primera ninguno de los aspirantes de la terna logró las dos terceras partes de los votos requerida– con 78 votos a favor para el período 2009-2014.

Su periodo comenzó el 16 de noviembre de ese año y termina el 15 de noviembre de este 2014 y su elección no estuvo exenta de impugnaciones y críticas.

Plascencia Villanueva venía entonces de ser el primer visitador de la CNDH y fue considerado como representante del “continuismo” de la gestión de José Luis Soberanes, según expresó la entonces presidenta de la Comisión de Derechos Humano del Senado, la reconocida luchadora social Rosario Ybarra de Piedra.

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