La tormenta Manuel desgajó el cerro y se llevó a sus hermanos

Adriana Covarrubias/El Universal

"El cerro explotó, salí corriendo por eso estoy viva, pero el cerro se llevó mi casa y mis hermanos", dice Marisela Mauricio Ortiz, quien tiene 19 años y el desgajamiento del cerro la estrella la dejó sin hogar y apenas el viernes los visitó Sedesol y recibieron una caja de despensa de la Cruz Roja a 10 días de los daños ocasionados por la tormenta Tropical Manuel.

En este poblado, con 450 habitantes donde se estima, según datos del comisario municipal Evaristo Herrera, al menos 100 niños, están incomunicados y todos viven con temor a que el cerro se vuelva a desgajar como lo ocurrido el pasado 17 de septiembre donde dejó el saldo de 8 viviendas destruidas, cuatro muertos y tiene heridos al caer el alud.

Los habitantes del pueblo acudieron este día a recibir otra dotación de despensas que les envió la Cruz Roja y a recibir atención médica luego de que el comisario del lugar bajo junto con el comisario ejidal, Alfredo Evaristo a pedir ayuda al gobierno porque estaban abandonados.

Al saber que llegaría más apoyo de víveres, Marisela Mauricio subió al pueblo, porque luego de perder su casa de madera y techo de lámina ahora vive en casa de su padrino en la comunidad de Ojo de Pescado a media hora del poblado de San Marcos.

Marisela, con estudios de sexto año de primaria, dice que aún no se repone de la perdida de sus hermanos, los extraña y llora cuando se acuerda como un fuerte viento y una avalancha de piedra y lodo los cubrió.

Se cubre su rosto con una parte de su blusa de manga larga que se puso encima de un vestido para abrigar un poco la mañana fresca que se siente en San Marcos, y platica que el desprendimiento de una parte del cerro la estrella, los dejó en la calle a los 8 integrantes de su familia.

"Yo estaba moliendo cuando escuche una explosión y salimos corriendo con mi mama, pero vi que se venía el cerro encima de las casas y a mi hermano se lo llevo el viento y la tierra".

Cuando se desgajo el cerro, no sabía dónde estaban sus dos hermanos, todos los del pueblo les ayudaron a buscarlo entre la tierra, pero los encontraron cuatro días después de lo ocurrido en el río del Llano de las Flores.

La búsqueda de cuerpos, cuenta el comisario ejidal duró más de cinco días porque ellos mismo tuvieron que excavar con palas y picos donde encontraron dos cuerpos.

Donde aterrizo el helicóptero de la Policía Federal, Black Hawk, se aprecia como parte del cerro la estrella se desgajo y quedaron casas sepultadas, pero también corto la carretera interestatal que conecta hacia Ometepec.

Marisela, quien ayuda como auxiliar de enfermería en el centro de salud de la comunidad de San Marcos, pidió que el gobierno federal y estatal le ayude con otorgarle una vivienda porque se quedaron en la calle.

"No tenemos donde vivir, ni dinero, ni ropa nada, nos quedamos en la calle, estamos viviendo en la casa de mi padrino pero por unos días mientras pasan las lluvias y nos iremos a Tlapa de Comonfort a buscar trabajo y vivienda".

Habitantes viven con temor, piden reubicación

Los habitantes de la comunidad de San Marcos, tienen miedo y ya no quieren vivir en esa zona, piden que el gobierno los reubique porque en cualquier momento con las lluvias que se registran el cerro puede venirse completamente a bajo y enterrar a todo pueblo.

"Estamos triste día y noche, no vivimos bien por lo que paso, ayer vino Sedesol a ver cómo estamos, pero queremos la vivienda, oportunidades, tenemos casa pero queremos cambiar otro lado, aquí ya no está seguro", dice Alfredo Evaristo comisariado ejidal.

Norberta Basurto Evaristo, una joven de 22 años también interviene en la plática y se queja que los maestros no han asistido a dar clases porque los caminos están cortados ni los médicos ni enfermera

Ella está en su pueblo sin poder ir a trabajar al municipio de Tlapa, porque no hay transporte debido a que los caminos están cortados.

"Estamos incomunicados, no podemos proveernos de comida porque es difícil cargar la comida caminando hasta el pueblo, tenemos que caminar 9 horas para llegar a Tlapa".

Norberta así como el resto de los habitantes tienen miedo de vivir en las laderas del cerro y piden que el gobierno los reubique y que manden especialista que investigue que hay en el cerro porque todas las noches truena.

"Todo el pueblo vive con el temor, ese cerro truena por las noches por eso no sabemos que hay, en las noches como que retumba, queremos que revisen que hay allá arriba y que vean si es seguro seguir viviendo aquí o ya no".

 

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