Eduardo Rivera se coloca a la cabeza del panismo tradicional

Fermín Alejandro García/Cuitlatlán/La Jornada de Oriente
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Eduardo Rivera Pérez aprovechó ayer la coyuntura de 3 actos políticos para lanzar el mensaje entre líneas de que el panismo tradicional de Puebla está presente, vivo y fuerte en la vida actual del estado; por tanto, tiene la capacidad de disputarle al neopanismo, encabezado por el gobernador Rafael Moreno Valle y el candidato ganador de la alcaldía de la capital, Antonio Gali Fayad, las dos candidaturas panistas a gobernador que habrá en los próximos cuatro años con ocho meses.

El edil de Puebla en realidad mandó tres mensajes cifrados al mismo tiempo: no solamente que el panismo tradicional ha re–emergido con fuerza en la vida política del estado; sino también que él está en condiciones de ser quien encabece esta corriente para ser el principal contendiente para alguna de las dos candidaturas del Partido Acción Nacional (PAN) a gobernador –la de un periodo de un año y ocho meses o la de seis años– que en el mediano y largo plazo estarán en juego.

Un tercer mensaje, o mejor dicho, una interpretación fue que Antonio Gali Fayad, por haber ganado la alcaldía de Puebla en los comicios del 7 de julio, en automático no se ha convertido en el principal y único aspirante a ser un próximo candidato del PAN a jefe del Poder Ejecutivo.

La breve declaración de Rivera de que está abierta la posibilidad de que pudiera buscar ser candidato a gobernador no es resultado de una simple entrevista casual –o banquetera, tal como se dice en el argot periodístico–, sino fue construida de una manera especial, ya que se dio en el día en que el alcalde de Puebla invitó a la capital a Luis H. Álvarez, al principal líder moral e histórico –con vida– del Partido Acción Nacional.

Otros dos actos que ocurrieron este miércoles con un fuerte significado político fue que Antonio Gali acudió al Palacio Municipal, por primera vez de manera oficial como edil electo, para iniciar el proceso de transición entre el gobierno saliente y el entrante.

Y que el gobernador Rafael Moreno Valle Rosas se encontró con los diputados locales en la inauguración de la nueva sede alterna del Congreso –ubicada en el edificio de El Mesón de Cristo, que fueron las antiguas oficinas del periódico El Heraldo de Puebla– y tuvo como principales protagonistas, a los legisladores panistas y los que son afines al mandatario.

Pareciera que con ello Eduardo Rivera busca evitar que avancen las siguientes dos ideas:

La primera es  que Antonio Gali ya va en caballo de hacienda directo a ser candidato a gobernador de Puebla y que su triunfo en la elección de alcalde de la capital fue consecuencia únicamente de la labor del grupo político del gobernador, haciendo a un lado la aportación del llamado voto duro del PAN, que es controlado por las corrientes tradicionales de ese partido.

La segunda es que en Casa Puebla se cree que no es necesario que se amplíe la tregua de no agresión que surgió –a principios de este año– entre el grupo del gobernador y del alcalde de Puebla, para que el PAN llegara cohesionado a la elección del 7 de julio.

Un punto clave de esta jornada política fue sin duda la manera en que Rivera construyó la visita del ex senador y ex presidente del PAN, Luis H. Álvarez, ya que las dos actividades que tuvo el ex dirigente –consistente en una comida el restaurante El Mural y un acto en el cabildo– solamente estuvieron presentes funcionarios, regidores y legisladores que pertenecen a los grupos tradicionales del panismo poblano y que en varias ocasiones han entrado en choque con el grupo político del gobernador Rafael Moreno Valle Rosas.

En particular destacó el discurso de Eduardo Rivera Pérez en el cabildo, en donde se le entregó la Cédula Real de Puebla a Luis H. Álvarez, pues lejos de destacar la larga trayectoria del invitado como dirigente y legislador panista, ensalzó sus aportes a la construcción de la democracia en el país y el régimen de libertades.

Todo ello sirvió para que Rivera dejara en claro que el panismo tradicional de Puebla se está reagrupando y lo está haciendo en torno al actual alcalde de la capital.