En Tehuacán, López Zavala entregó al PRI resultados positivos

Fermín Alejandro García/Cuitlatlán/La Jornada de Oriente
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El resultado electoral de Tehuacán se ha convertido en el triunfo de la honra para el Partido Revolucionario Institucional (PRI), no solamente porque es la segunda ciudad más importante y poblada del estado, sino porque ahí hubo un particular empeño del gobernador Rafael Moreno Valle Rosas en buscar derrotar al empresario priista Álvaro Alatriste Hidalgo, intento que se acabó frustrando. En mucho la votación favorable al tricolor se debió a la operación que en dicha zona sur del estado realizaron Javier López Zavala y grupos ligados al ex gobernador Mario Marín Torres.

López Zavala tenía la encomienda de obtener victorias para el PRI en Tehuacán, Ajalpan y Amozoc.

Al final cumplió ampliamente en Ajalpan, en donde el PRI ganó la alcaldía y el distrito, mientras que en Tehuacán se ganó el distrito sur, con Geraldine González de la Garza, y se triunfó en la alcaldía con la aspirante Ernestina Fernández, la esposa de Álvaro Alatriste, y quien sustituyó a este último cuando la quitaron el registro de candidato a edil, luego de que su postulación fue impugnada por el Partido Acción Nacional (PAN) ante una orden que salió directamente de Casa Puebla.

El ex candidato a la gubernatura y ahora diputado federal Javier López Zavala fue de los pocos líderes del PRI que entregó un resultado positivo.

A diferencia del ex alcalde Enrique Doger Guerrero, que no pudo hacer ganar a Sandra Montalvo en el Distrito XII de Puebla, en donde fue postulada como candidata a diputada local.

Ni tampoco hubo buenos resultados en el Distrito XIII de Puebla, que es donde hizo mayor presencia la ex edil de la capital Blanca Alcalá Ruiz, ya que perdió el priista Héctor Sulaiman y ganó Franco Rodríguez, quien consiguió la votación más alta para un candidato panista en el estado, después del resultado que consiguió Antonio Gali como aspirante a alcalde de la Angelópolis.

En el caso del ex gobernador Melquiades Morales Flores, de sobra es conocido su colaboracionismo con el gobierno de Moreno Valle. En general no se percibe ninguna ayuda al PRI del ex mandatario. En Ciudad Serdán, la tierra del ex jefe del Poder Ejecutivo, ganó el tricolor, pero con un candidato ajeno al poder político regional de la familia Morales Flores.

Se supone que Melquiades Morales daría un apoyo especial a Ariadna Ayala Camarillo, la candidata del PRI en Atlixco, y al final esta mujer fue vapuleada en los comicios del domingo.

La peculiaridad del caso Tehuacán

Un aspecto poco conocido es que el distanciamiento que existe entre José Doger Corte y Rafael Moreno Valle Rosas es consecuencia de que cuando el primero ellos –que en este proceso electoral fue candidato del PRI a diputado por un distrito de la capital– era auditor general del Órgano Superior de Fiscalización fue presionado para que se frenaran las auditorías que se habían emprendido contra el ex alcalde de Tehuacán, Álvaro Alatriste, a lo cual no accedió, puesto que había fondos federales que no podían dejar de ser revisados en su aplicación.

Quien ejerció esa presión era Rafael Moreno Valle Rosas, protector de la carrera política de Álvaro Alatriste Hidalgo, quien finalmente fue inhabilitado por varios años del servicio público no por robarse el dinero, sino por no haber llevado un estricto control administrativo del erario.

Ese vínculo entre Moreno Valle y Alatriste Hidalgo se rompió en 2010, cuando el empresario abarrotero no quiso apoyar al panista en su proyecto de volverse gobernador de Puebla, entre otros factores porque en ese entonces estaba del lado del priista Javier López Zavala.

Dicho desaire provocó que hace poco más de dos meses, en una reunión realizada en Casa Puebla, en donde se destapó a René Lezama Aradillas como candidatos del PAN a edil de Tehuacán, el gobernador Moreno Valle diera la orden a los panistas de esa ciudad de que impugnaran la candidatura de Álvaro Alatriste, lo cual se hizo y semanas más tarde el recurso cobró efectos, por lo cual el empresario abarrotero perdió el registro oficial de aspirante.

Todo parecía perdido para el PRI de Tehuacán; sin embargo, al final funcionaron dos factores que permitieron derrotar al PAN. Estos son:

El Partido Revolucionario Institucional logró martirizar la figura de Ernestina Fernández y Álvaro Alatriste, quienes fueron vistos por amplios núcleos del electorado como priistas identificados con las clases populares y como políticos que enfrentaban toda la maquinaria del Poder Ejecutivo para evitar que lograran ganar la contienda.

Tal manejo de la campaña permitió al tricolor remontar frente a René Lezama, quien tenía una figura de político elitista.

El segundo factor que funcionó fue la movilización de las estructuras del PRI en Tehuacán, como consecuencia de un grupo de promotores del voto que controló Álvaro Alatriste; y otro más, que fueron dirigidos por López Zavala y priistas vinculados al ex gobernador Mario Marín Torres.

Con el triunfo del tricolor en Tehuacán y en Ajalpan se evitó que la debacle del Partido Revolucionario Institucional fuera total en  todo el estado, ya que fuera de estas plazas solamente se consiguieron victorias pírricas.

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