Amanecía… que no es poco. Caminaban entre la bruma y el aire frío. Ella empezó a discernir:

“¿Es la locura el principio o el fin? --se contestaba sola--. ¡qué importa! Desde que tengo uso de locura, me pregunto: ¿A qué huele la locura? ¿A qué sabe? ¿De qué color es? ¿Vuela, camina, nada, se arrastra o se inflama?

“¿La locura tiene moléculas? ¿Se mide? ¿Cómo? ¿Sólo por ©más© o ©menos© o tiene cuerpo y densidad, peso y medida, volumen y estructura, complexión y altura? ¿Es estática o móvil, se agrupa o es solitaria? ¿Tiene identidad? ¿Crece o es fija? ¿Tiene una, dos, tres o cuatro dimensiones? ¿Es punto, línea, plano, cuerpo o el puro pensamiento?

“Si la locura tiene moléculas, ¿tiene átomos? Y si tiene átomos, ¿tiene núcleo? Si tiene núcleo, ¿tiene electrones? ¿Los electrones giran a su alrededor en su enloquecida carrera o se van en línea recta?

“La locura es una ciencia, no se sabe si dura a blanda o a conveniencia, ¡a veces dura y a veces desaparece!

“¿Tiene sus propias leyes que ella misma crea, destruye y transforma, o sólo no las pela…?

“¿La locura se suma, se multiplica, se resta o se divide? ¿O no realiza operaciones aritméticas? Si se divide la locura ¿cada una de sus partes la conserva intacta a toda ella, o se fragmenta entre ellas? ¿Podría mi mano ser parcialmente loca si me la cortaran? ¿Y mis ideas son sólo tantito locas porque no son, toda yo? Hay un límite donde la partícula más pequeña de locura ya no puede dividirse y si lo hace, ¿es ya otra cosa?

“¿La locura se incrementa, decrece o se establece ©la misma?© ¿Es la locura hoy la misma que ayer, y será la de mañana o cada tiempo tiene su propia locura?

“¿La locura, si se enoja, se encontenta? ¿Hace las paces y las ©choca© como cuando de niños alegremente reestablecíamos una relación? ¿Con quién es que tiene una relación la locura, con sí misma o con ©la otra?©

“¿La locura sabe o no sabe? ¿Qué sabe? ¡No sabe!

“La locura besa y juega ¿dónde besa la locura si besa? Y si no besa por qué no besa. La locura besa la mente loca con besos locos de frenética locura.

“¿La locura es de cristal? ¿Es circular y tiene diámetro y radio? ¿Se estructura? ¿Es invisible y se ve? ¿Se rompe o sólo refleja?

“¿A la locura le da frío? ¿Se expande por el calor y se encoge con el frío, o a la inversa: se  expande con el frío y se encoge con el calor?

“Tengo frío”, le dije a su acompañante que continuó caminando a du lado entre tanta locura, y éste le respondió: “¡Eso, no es culpa del frío!…”

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